lunes, 4 de agosto de 2014

Vallado para animales

Si tenemos un terreno o unas instalaciones en las que transitan animales es importante delimitar bien las zonas en las que pueden estar con cercados de seguridad. Ya sean granjas, cotos de caza o terrenos al aire libre, los animales deben estar bien protegidos en el interior y los cercados deben ser lo suficientemente resistentes como para evitar que puedan salir. Las vallas en zonas en las que hay animales tienen también otro cometido: evitar que alguien de fuera pueda acceder al recinto.


Amenazas del exterior
Los vallados deben mantener protegido el terreno evitando que pueda haber personas ajenas que entren en los terrenos. Los cercados de pinchos o electrificados suelen ser lo suficientemente disuasorias para los ladrones y también sirven para que los animales no se acerquen a las zonas colindantes. En el caso de los cercados con electricidad, las descargas suelen ser leves de manera que no dañan al animal pero sí evitan que intenten atravesar el cercado.

Evitar accidentes
Algunos accidentes de carreteras secundarias se producen porque un animal ha invadido la carretera y el conductor no ha podido evitar el choque. En ocasiones se producen porque las vallas que rodean los cercados que están en las inmediaciones de la calzada están en mal estado o no son lo suficientemente resistentes para el tipo de animal. Lo más habitual es utilizar vallas de alambre de púas o de alambre tejido colocadas entre postes de madera tratada, ya que resiste muy bien al aire libre.

Mantenimiento adecuado
No es suficiente con instalar las vallas, sino que hay que llevar a cabo un mantenimiento para evitar desperfectos y supervisar el buen funcionamiento de las mismas. Un par de veces al año deberá revisarse palmo a palmo todas las partes del cercado ya que podría haberse aflojado el alambre en algunas zonas o incluso, haberse abierto algún hueco por el que los animales podrían escaparse.