La concertina de seguridad es
uno de los métodos de seguridad en el perímetro más utilizados a
la hora de proteger una superficie. Lejos de lo que pudiera parecer,
su instalación es realmente sencilla si se realiza con precaución y
siguiendo todos los pasos.
Lo primero es delimitar la densidad del
rollo que se va a utilizar, si queremos que la concertina de alambre esté más tupida o menos. Una vez decidido habrá que
adquirir los rollos según el perímetro del lugar. Se colocan los
rollos sobre el poste inicial y se fija con abrazaderas arriba y
abajo. El rollo de concertina ha de tensarse y fijarse cada
ciertos metros para que mantenga la tensión mientras se despliega.
Es importante empalmar bien un rollo
con otro sin dejar ningún espacio, ya que podría ser un punto flaco
de nuestra seguridad que podría aprovecharse para entrar al lugar.
Por último, la concertina debe ser fijada al cerco como medida de
seguridad para que quede completamente fija.